hidroponía

¿Es la hidroponía apta para todas las variedades de berries?

Los límites de la hidroponía o cultivo sin suelo son bastante amplios, ya que incluye todos los sistemas y métodos que hacen que los cultivos crezcan fuera de su entorno natural, como el suelo. Clasificar el tipo de sistema sin suelo depende de criterios fundamentales, siendo el más limitante el entorno físico donde se cultivan y desarrollan las raíces de las plantas. Dicho esto, los límites de los cultivos sin tierra serán los sistemas con sustratos de fibra de coco.

El cultivo de berries directamente en el suelo se considera el método tradicional. En este caso, las características del suelo deben ser adecuadas y estables a largo plazo. Con los años, la degradación del suelo se ha incrementado debido a las malas prácticas implementadas por los productores, favoreciendo así la fatiga del suelo.

Las razones de la pérdida de la estructura del suelo son las siguientes:

  1. Fatiga del suelo, debido a la acción repetida del monocultivo y que implica un menor desarrollo de los cultivos.
  2. La compactación del suelo causada por una disminución en el espacio de los poros y, en consecuencia, reduciendo la aireación. Además, aumenta el riesgo de encharcamientos.
  3. Reducción de la materia orgánica, pérdida de biodiversidad de ciertos organismos del suelo debido a la falta de alimento. La ruptura de la estructura del sustrato también es favorecida.
  4. Salinidad del suelo, desequilibrios nutricionales debido a las altas concentraciones de sal.

hidroponía

 

Teniendo en cuenta estos factores, se introduce la producción sin suelo de berries en la fibra de coco. La alta tecnología utilizada en la fabricación de fibra de coco permite a los productores elegir las texturas y características que consideran más adecuadas para el desarrollo de la raíz y el crecimiento de la planta. Con el sistema hidropónico, los productores de frutos rojos tendrán un mayor control sobre las condiciones del cultivo.

 

Las principales ventajas del sistema sin suelo son:

  1. Homogeneización del cultivo y del medio radicular.
  2. Se eliminan las infecciones del suelo y los desinfectantes peligrosos.
  3. La energía que la planta invierte en el acondicionamiento de la raíz se reduce ya que está situada en un sustrato que tiene una excelente relación de aire/agua.
  4. Disminución de insumos debido al uso eficiente de agua y nutrientes.
  5. Mejor control del desarrollo vegetativo y productivo de las plantas.
  6. Mayor producción y en ciclos tempranos.
  7. Producción de mayor calidad.

 

El buen manejo del sistema sin suelo determinará el éxito del cultivo, lo que requiere una mayor responsabilidad por parte del productor. Requiere atención diaria a las prácticas de cultivo, como el riego, el suministro de nutrientes, etc.
Teniendo en cuenta las necesidades de cada variedad de berries, la elección correcta del tipo de sustrato que mejor se adapte para preservar la planta estará determinada por:

  • La protección de la raíz.
  • La adecuada absorción y retención de agua.
  • La disponibilidad de nutrientes.
  • La adecuada capacidad de aireación. Esto asegurará la correcta difusión e intercambio de aire en la matriz de la zona radicular durante su ciclo de vida.